Secretos de la cocina creativa para niños
Secretos de la cocina creativa para niños
¿Os preguntáis con frecuencia qué preparo hoy para comer? y ¿los niños se lo comerán o me harán hablar? ¡Aquí os desvelamos los secretos de la cocina creativa para niños!
La elaboración diaria de las comidas puede ser, en ocasiones, una labor que se no hace cuesta arriba bien porque no nos gusta cocinar o porque disponemos de poco tiempo para esta labor. Pero si a esta ecuación le sumamos el tener niños a los que no les gusta determinados tipos de alimentos y/o son inapetentes, el problema ¡se complica mucho más!
¿Cómo alimentar a los pequeños de la casa?
Los más pequeños tienen necesidades distintas según su edad, complexión, actividad física o si padecen algún tipo de patología. A partir de esta premisa, los padres por lo general suelen elaborar una misma comida para toda la familia y en el plato de los peques ponen la cantidad y variedad de comida que les corresponde, según esos parámetros.
Y eso está muy bien… y es como debe ser, pero en numerosas ocasiones la teoría es una cosa y la práctica va por otro camino.
Los niños necesitan una nutrición equilibrada en la que estén incorporados alimentos como la carne, los huevos, el pescado, las frutas, las verduras o las legumbres… pero el pescado y la verdura suelen ser los alimentos más conflictivos en la dieta de los niños, aunque la lista puede ampliarse con otros alimentos que tampoco les resultan atractivos, ya sea por su sabor o por su aspecto.
Para solventar este problema necesitaremos utilizar un plan B ¿y de qué forma? Utilizando la imaginación, algo más de nuestro tiempo y ¡cómo no! un poquito más de paciencia.
La finalidad es prepararles la misma comida que vamos a comer, pero de una forma más divertida, para que estén bien nutridos y se lo coman sin rechistar.
A continuación, os dejamos una serie de trucos para hacer que la comida sea más atractiva.
Trucos para una cocina más creativa
- Presentación atractiva. Como transformar frutas o meriendas en objetos divertidos, animales…
- Utilizar las cremas y los purés, para las verduras, con colores atractivos y algún tipo de aderezo como queso rallado, frutos secos, etc.
- El pescado empanado o rebozado el pescado, les resultará más sabroso.
- Las patatas o el kétchup (en poca cantidad), suelen gustar a casi todos los niños, y su sabor, amortiguará el de los “alimentos conflictivos”.
- Compartir la tarea de cocinar con ellos, es una buena forma para que se acerquen a los distintos alimentos, participen en el proceso de elaboración y, tal vez, sea un aliciente para probar el plato que “ellos han elaborado”.
- Jugar con las formas, los colores, las texturas como muy buenas opciones opciones para la ingesta de la fruta.
- Añadir a los utensilios clásicos de la cocina, nuevos moldes con formas variadas, para darles un toque de originalidad a los platos.
- Seguir tutoriales de Food Art para crear pequeñas obras de arte comestibles para modelar personajes y paisajes en el plato.
Somos conscientes que gran parte de los trucos requieren un tiempo adicional a lo habitual, pero tal vez en estos momentos en los que la presencia en casa suele ser mayor podamos ponerlos en práctica y si no siempre nos quedará el fin de semana, como punto de partida.
Esperamos que con estos consejos vuestros hijos estén bien alimentados, vosotros más tranquilos… y todos hayáis ganado un plus de diálogo y cocina creativa.